
BASÍLICA PRE PAPADO DEL PAPA SIXTO V
Antes del papado de SIXTO VI, la ciudad de Roma ya contaba con varias iglesias y centros religiosos, pero muchas estaban deterioradas y en mal estado tanto arquitectónico como también en relación con el entorno urbano. Una de ellas era la basílica de San Juan de Letrán, que se encontraba aislada del resto de Roma, en una zona sin conexión directa con otras basílicas. También tenia un acceso dificultoso con caminos angostos y mal cuidados. Tampoco contaba con plazas o avenidas ordenadas en su entorno.
Luego de que Sixto v de a luz su nuevo plan urbanístico, las basílicas comenzarían a reconstruirse tanto en su interior como en sus fachadas, mostrando armonía y orden en cada una de ellas.
Pintura de Giovanni Paolo Pannini de la Basilica San Juan de Letrán
“La persuasión tenia como finalidad la participación, De hecho, el mundo barroco se puede definir como un gran teatro donde cada cual tiene asignado su papel. Sin embargo, tal participación pre supone imaginación, facultad que se educa por medio del arte. Por lo cual el arte era de importancia primordial en la época barroca. Sus imágenes eran medios de comunicación mas directos que la demostración lógica y además, accesible a analfabetos. En consecuencia, el arte barroco se concentra en imágenes vivaces de situaciones , tales y su reales, mas que en la historia y la forma absoluta.” (Norberg-schulz, 1973, pág. 10)


La basílica de San Juan de Letrán se considera una de las iglesias mas importantes, mas antigua y significativa de Roma. La estructura de la basílica tuvo varias reconstrucciones y reformas a lo largo de los siglos, combinando la arquitectura romántica, renacentista y barroca. Cuenta con un interior caracterizado por alternancia térmica de columnas y arcos. Muchas de esas columnas de origen romano y otras reconstruidas, están decoradas por capiteles corintios. Cuenta con muros revestidos con mármoles policromos y ornamentaciones barrocas que enriquecen visualmente el espacio.
Interior de la Basilica San Juan de Letrán
En el periodo papal de Sixto v, la basílica fue conectada mediante vías directas con otras basílicas mayores de Roma , formando un conjunto arquitectónico-urbano con enfoque religioso y simbólico de ese entonces.
La planta es basilical de cinco naves, con la central separada de las laterales mediante columnas que sustentan arquitrabes, mientras que las columnas de las naves laterales, de menor altura, sustentaban arcos de medio punto. A la gran nave central daba un gran ábside semicircular.

San Juan de Letrán posee dos fachadas. La más solemne, realizada en el siglo XVIII, está coronada por una balaustrada con la imagen de Cristo y varios santos. La fachada secundaria está junto al obelisco, orientada hacia el Coliseo y Santa María Mayor.
